lunes, 23 de agosto de 2010

¿Te imaginas?



¿Te imaginas dar el salto?
¿Te imaginas llegar justo al otro lado del horizonte
tal y como lo habías soñado?
¿te imaginas morirte de miedo
y no querer dar un paso atrás?
¿te lo imaginas?

sábado, 7 de agosto de 2010

¿Mal día?

Si el día comienza a las 5:49 de la mañana.

Si te despiertas de un salto y con las pulsaciones a mil.

Si lo que te despierta son las voces que está dando un borracho que maldice su existencia mientras pasa por tu calle.

Si el día que más madrugas es el que menos cunde.

Si nada sale a la primera.

Si alguien te decepciona o te hace daño de forma gratuita porque no se ha parado ni medio minuto a pensar en lo que dice.

Si te pasas seis horas sin poder recuperarte de aquello.

Si una vez que te recuperas te das cuenta de que hay cosas de las que todavía no aprendes.

Si ese día discutes con tus padres después de no haberlo hecho en meses.

Si no te apetece ningún plan.

Si pierdes las llaves.

Si quedas con tu chico a última hora y os clavan por dos refrescos en un bar.

Si los planetas se alinean para que tengáis esa conversación en la que no os ponéis de acuerdo.

Si llegas a la cama rendida deseando que por fin se acabe ese día...

Piensa que...

Esa madrugada el borracho lo estaba pasando peor.

Lo que dejaste de hacer lo puedes hacer otro día.

Que lo que no sale a la primera, siempre acaba por salir a la segunda o la tercera.

Que, efectivamente, estabas en lo cierto y conoces muy bien a la gente que te rodea.

Que no hace daño el que quiere sino el que puede.

Que hacía meses! que no discutías con tus padres.

Que no te apetecía ningún plan y acabaste yendo al cine con tu hermana, con la que hacía mucho que no hacías nada.

Que os encantó la película y que la invitaste a cenar.

Que después encontraste las llaves.

Que con un abrazo de él nada parece para tanto.

Que probasteis, de una vez por todas, el Biofrutas Ibiza (aunque no estaba tan bueno).

Que al final os pusisteis de acuerdo.

Que cuando llegaste a la cama, ya era MAÑANA.